Conexión Matanza
Con una notable asistencia de público, se llevó a cabo una muestra de ciencia y tecnología en el municipio de La Matanza. Exactas-UBA participó con experiencias interactivas a través de los departamentos docentes y del equipo de divulgadores de la Secretaría de Extensión.
Se podría decir que, a la hora de las actividades de popularización, Exactas UBA se encuentra “en estado”. Después de muchos años de entrenamiento, la Facultad de Ciencias Exactas y Nautrales tiene aceitados los mecanismos para responder ante requerimientos de extensión a través de sus docentes y los equipos del Área de Popularización de la Ciencia de la SEGB (Secretaría de Extensión Graduados y Bienestar). La última intervención puertas afuera ocurrió hace pocos días, en la 2da. Semana Municipal de la Ciencia y la Tecnología, organizada por el municipio bonaerense de La Matanza y más difundida como “Plaza de las Ciencias”. En este caso, ante la propuesta de participación, la SEGB respondió a partir de las propuestas de distintos departamentos docentes, del Equipo de Divulgadores y de una charla sobre la proyección de las carreras científicas y tecnológicas a cargo del decano, Jorge Aliaga.
La actividad se llevó a cabo en un sector de la playa de estacionamiento del shopping de San Justo del 12 al 19 de junio. En grandes carpas se ubicaron los distintos stands que pudieron recorrer miles de alumnos durante los siete días de la muestra y también el salón auditorio donde se realizaron charlas y seminarios sobre ciencia, educación y nuevas tecnologías.
La Secretaría de Ciencia, Tecnología y Políticas Educativas de La Matanza –creada en 2011– tuvo a su cargo la muestra. Adriana Berra es asesora de la Secretaría y trabajó en la organización. “La actividad tuvo dos actores principales”, cuenta Berra, “los alumnos de las escuelas técnicas y las instituciones que nos acompañaron, como es el caso de YPF, Aerolíneas Argentinas, Conectar Igualdad, ANSES, el Servicio Meteorológico Nacional, el INTI o Exactas de la UBA, que, junto con la Universidad de La Matanza, fueron las únicas instituciones educativas”. Berra se entusiasma hablando de los alumnos de los colegios locales: “El caso de los alumnos nos llena de orgullo, participó la totalidad de las 14 escuelas técnicas del municipio, cada una montó su stand y los alumnos estuvieron al frente de los mismos, mostrando sus desarrollos. El balance es muy positivo, este año las actividades estuvieron más dirigidas al público de las escuelas secundarias, creo que se cumplió con el objetivo de introducir a los jóvenes en el conocimiento de las carreras científicas”.
El mismo registro de los alumnos de las escuelas técnicas matanceras se lo llevaron también algunos docentes de Exactas. “Muchos de los stands de la feria estaba a cargo de chicos de escuelas técnicas de la zona, que mostraban con orgullo lo que hacían en sus talleres. Estos chicos de a ratos dejaban sus stands para convertirse en público, un público naturalmente inquieto frente a los desafíos que les planteaban los juegos matemáticos que teníamos en el stand de Exactas. Muchos de ellos se quedaron hasta descubrir la estrategia ganadora, después de lo cual se divertían de lo lindo ganándole a los demás”, relata Nicolás Siroli, docente del Departamento de Matemática.
Por su parte, Diego Moreira, del Departamento de Ciencias de la Atmósfera y los Océanos, afirma que “El frío no evitó la asistencia de gran cantidad de gente ni la buena predisposición de los alumnos y graduados del Departamento, que explicaron los experimentos sobre los fenómenos meteorológicos y oceanográficos y su importancia en la naturaleza. Como ocurre en las otras experiencias demostrativas, entusiasma mucho lo sorprendidas que quedan las personas que se acercan a ver los experimentos y las preguntas que hacen, el interés que tienen en las ciencias y las ganas de saber más y conocer mejor cómo se hace ciencia en el país. Nunca mejor aplicada la frase de la Facu Acá hay ciencia. Bueno, la ciencia también va de visita a otros lugares”.
Los paleontólogos llevaron sus experiencias sobre ictiología y sedimentos. “La interacción con el público resultó muy buena, sobre todo ante la posibilidad de hacer analogías con lo cotidiano, a través del ejemplo de piletas, charcos o costas donde es posible advertir cómo los sedimentos, por su tamaño y por la humedad, repercuten en forma directa en las huellas que podemos dejar. La experiencia se complementa con la observación y explicación de ejemplos fósiles, que siempre resultan de gran atracción”, describe el paleontólogo Pablo Pazos.
El Equipo de Divulgadores de la SEGB tuvo a su cargo la difusión institucional y también algunas experiencias demostrativas. Nicolás Arencibia, que es estudiante de química y forma parte del equipo, se muestra muy conforme con la experiencia. “Estuvo genial. Todo el montaje estaba muy preparado y había de todo. Muchos pibes de secundaria mostrando proyectos suyos, muchos organismos exponiendo. En nuestro caso, fue una experiencia en busca de despertar vocaciones científicas”. Otro divulgador que participó en San Justo fue Martín D´Amato, estudiante de paleontología. “Aplaudo de pie la iniciativa de armar expos de ciencia, no sólo en Capital sino también fuera de ella. Esto hace que nuestro trabajo, el de divulgar ciencia, llegue más lejos y a más público. Estos espacios nos muestran que en Argentina se hace ciencia y todos podemos participar de ello. Ver cómo el público se interesa, cuestiona y pregunta es altamente satisfactorio. Eso nos dice que estamos haciendo bien nuestro trabajo”, cierra entusiasmado.