Cuando la atmósfera se queda sin señal
Así como algunas veces sucede que nuestro teléfono celular no tiene señal y nos sentimos frustrados por no poder comunicarnos, la atmósfera también puede experimentar un fenómeno similar y truncar la posibilidad de brindar pronósticos certeros en tiempos mayores a la semana. A diferencia de lo que ocurre con el pronóstico del tiempo que habitualmente… Ver artículo
Así como algunas veces sucede que nuestro teléfono celular no tiene señal y nos sentimos frustrados por no poder comunicarnos, la atmósfera también puede experimentar un fenómeno similar y truncar la posibilidad de brindar pronósticos certeros en tiempos mayores a la semana.
A diferencia de lo que ocurre con el pronóstico del tiempo que habitualmente consultamos, el pronóstico climático -aquel que brinda información en escalas temporales del orden de los meses- depende fuertemente de la situación en la que se encuentran diferentes componentes del sistema climático, como los océanos tropicales y la estratosfera en latitudes polares, entre otros. De este modo, ante la ocurrencia de un fenómeno como El Niño podemos anticipar cómo será la temperatura y la lluvia en nuestro país en los meses siguientes.
Sin embargo, este comienzo de año encuentra a la atmósfera sin influencia de alguna de las componentes que comúnmente la afectan: El Niño continúa en condiciones neutras, como sucedió durante todo el invierno y toda la primavera; el océano tropical no presenta regiones más cálidas o frías que lo normal; la oscilación de Madden-Julian se encuentra inactiva en estos momentos; y la estratosfera en latitudes altas no está influenciando lo que ocurre en los niveles más bajos de la atmósfera.
De esta manera, lo que ocurra en escalas climáticas puede ser, por un lado, el resultado de la sucesión de fenómenos de escalas temporales más cortas sin ninguna organización preferencial o, por otro lado, pueden existir otras componentes que afecten el clima y cuya influencia en nuestra región todavía no haya sido documentada.
Ante la ausencia de una señal climática promovida por los mecanismos antes mencionados, anticipar la evolución del clima en los próximos meses se hace muy difícil y cualquier pronóstico que se emita tendria un alto nivel de incertidumbre y en consecuencia una mayor probabilidad de desacierto.
Es el estudio exhaustivo de la circulación de la atmósfera en gran escala la herramienta que permitirá entender mejor lo que sucede con el clima cuando la atmósfera no tiene señal. En la Facultad de Ciencias Exactas y Naturales de la UBA se están desarrollando actualmente investigaciones en ese sentido.