

El último informe especial del IPCC puso el foco sobre la importante contribución que la ganadería realiza al calentamiento global. Incluso sugirió que una disminución del consumo de carne vacuna ayudaría a mitigar este fenómeno. La ganadería es una actividad tradicional y emblemática en nuestro país. Frente a esta realidad, ¿qué actitud deberían adoptar los ganaderos argentinos? ¿Se pueden incorporar nuevos sistemas de producción económicamente viables y sostenibles desde el punto de vista ambiental? Es más: ¿Qué futuro tiene la actividad si no se reconvierte?