La señal de saciedad es más importante de lo que se pensaba. En efecto, un equipo de investigación argentino identificó un gen maestro que ya se expresa en el embrión temprano, y que controla la activación de la señal que hace que dejemos de comer. Si ese gen falla, se cae todo el sistema. Frente a la pandemia de obesidad, este trabajo pone en evidencia de qué manera nuestro genoma está programado desde el desarrollo para que comamos sólo lo necesario.
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No son tan solitarias como podría pensarse. En efecto, unas 60 especies de arañas, de un total de varias decenas de miles, son sociales y viven en comunidad, y ello les brinda varias ventajas: les facilita la construcción de la red trampa y la captura de presas más grandes y en mayor número. Estas arañas sociales se ayudan entre sí en la alimentación y el cuidado de las crías y, a diferencia de otras especies, no practican el canibalismo sexual.
Silvina Ponce Dawson estudió física en Exactas en plena dictadura militar. Llegó a la Facultad cuando para ingresar había que dar examen y sortear, diariamente, una guardia policial. A lo largo de su cursada participó en numerosas acciones de resistencia a pesar del clima de terror en el que se vivía. A 43 años del golpe más cruento de la historia argentina, Ponce Dawson, profesora e investigadora de larga trayectoria en la Facultad, describe con minucia el sistema represivo y las múltiples formas de persecución y control que sufrían los estudiantes.
Los peces conocidos como “morena”, tanto machos como hembras, son agresivos y pelean permanentemente por su espacio de agua. El triunfador en esa lucha marcará su territorio, pero ambos registrarán cambios en su cerebro. El hallazgo le corresponde a la investigadora uruguaya Ana Silva, quien adelanta que apunta a construir perfiles que le permitan encontrar tendencias generales universales de la dominancia y subordinación.
El ratón casero -la laucha- es una plaga mundial responsable de la transmisión de enfermedades que pueden ser mortales. Además, provoca perjuicios económicos considerables. Los venenos que se usan para controlarlo pierden efectividad y afectan el ambiente. Un estudio efectuado en Exactas UBA propone un método alternativo cuyos resultados preliminares son promisorios.
Tras más de una década de trabajo, que incluyó la convivencia con el pueblo originario, una investigadora logró reunir y catalogar las plantas medicinales utilizadas por los wichís y describir sus usos terapéuticos y las formas de preparación y aplicación. El desmonte creciente atenta contra la sustentabilidad de estos recursos.