Hepatitis ¿estás ahí?
Mucho más económico que los importados, totalmente nacional y el único en el país que puede ser usado tanto en personas como animales. Esto es MultiHEP-NanoDetect, el proyecto desarrollado por la UBA y la Universidad de Tucumán, que ganó el segundo premio Innovar 2023 en Salud y fue el más votado por el público en su categoría.
Cada año, 20 millones de nuevos casos de infección por el virus de hepatitis E se suman en el planeta, según estima la Organización Mundial de Salud, pero en América Latina hay pocos testeos pues faltan métodos de diagnóstico accesibles. ¿Sería posible desarrollar en la Argentina un kit económico para detectar la presencia de anticuerpos de esta enfermedad, tanto en personas como en animales? La respuesta es sí, como lo demuestra MultiHEP-NanoDetect, que acaba de obtener el segundo premio Innovar 2023 en Salud y, además, fue la iniciativa en su categoría que reunió la mayor cantidad de votos del público en una elección abierta hecha por la web.
“Este proyecto lo hicimos junto con el grupo de Guadalupe Vizoso-Pinto (INSIBIO Universidad Nacional de Tucumán), expertos en el diagnóstico de la hepatitis E. Nosotros desarrollamos los nanoanticuerpos que permiten realizar al diagnóstico ofreciendo una determinación específica de anticuerpos generados contra el patógeno. El trabajo es 50 y 50”, precisa la doctora en biología, Itatí Ibañez, directora del Laboratorio de Ingeniería de Anticuerpos en el INQUIMAE (UBA – CONICET), en la Facultad de Ciencias Exactas y Naturales de la UBA.
A partir de una muestra de sangre, en no más de cuatro horas, MultiHEP-NanoDetect, permite identificar la presencia de anticuerpos para saber si esa persona o un animal estuvo infectado por el virus de la hepatitis E. “Esta infección es asintomática en la mayoría de los humanos, pero en personas inmunocomprometidas puede ser letal”, indica Ibañez. Hoy, no es tan sencillo alcanzar un diagnóstico. “En América Latina hay poco testeo porque los kits específicos no son fácilmente accesibles”, agrega.
A partir de una muestra de sangre, en no más de cuatro horas, este kit permite identificar si una persona o un animal estuvo infectado por el virus de la hepatitis E.
Las ventajas de MultiHEP-NanoDetect son múltiples. “Este kit es de producción nacional, a diferencia de los que se utilizan actualmente –que son muy pocos y solo se encuentran en centros de referencia–, que son importados”, indica Ibañez, y subraya su económico proceso: “Decimos que es barato porque normalmente para el desarrollo de sistemas de diagnóstico se usan anticuerpos monoclonales, los cuales son del orden de 10 a 20 veces más caros que los nanoanticuerpos empleados en esta propuesta. Los podemos producir a gran escala y distribuir en el sistema público de salud”.
Pero aún hay más, como señala Florencia Pavan, biotecnóloga e integrante del equipo. “En la Argentina, este es el único kit capaz de detectar la presencia de anticuerpos contra el virus de la hepatitis E tanto en humanos como en animales”, menciona.
En llamas
Todo comenzó en una cita científica, intereses complementarios, nanotecnología, llamas y pasión por la investigación. “En un congreso nos encontramos con Lorena Arce, integrante del grupo de Guadalupe, que tenía el deseo de desarrollar el kit de diagnóstico, pero no podían producir los nanoanticuerpos. Entonces, surgió la idea de la colaboración”, historia Ibañez.
Hacia principios de 2020 empezaron las pruebas en camélidos. “Lo que hacemos es inmunizar a la llama con proteína o componentes del virus de la hepatitis E. Luego, mediante varias técnicas de biología molecular y bioquímica de proteínas, pudimos obtener pequeños anticuerpos que detectan de manera específica al virus. A partir de ahí, los modificamos y los utilizamos para desarrollar el kit de diagnóstico, que se llevó adelante en Tucumán”, describe.
Se trata de una enfermedad emergente y forma parte de las dolencias desatendidas porque afecta a las personas más pobres que están en contacto con animales infectados.
Por cierto, la pandemia de covid interrumpió parte de los trabajos. A pesar de ello, en alrededor de dos años, ambos laboratorios finalmente tuvieron en sus manos MultiHEP-NanoDetect, para ayudar a detectar la hepatitis E. “Esta es una enfermedad emergente, o sea, cada vez hay más casos, y también forma parte de las dolencias desatendidas porque afecta a las personas más pobres que están en contacto con animales infectados. Se contagia –puntualiza Ibañez– a partir de la materia fecal y de la sangre”. Por su parte, Pavan suma: “Una de las principales causas de contagio es por el consumo de carne de cerdo y jabalí mal cocida”.
Horizonte futuro
Si bien ya son variadas las razones que justifican el interés por este desarrollo, aún falta mencionar algunas sobre la valoración de esta iniciativa. “¿Por qué es importante? Porque cuando una persona va a donar a un banco de sangre, le analizan si no ha tenido hepatitis A, B y, a lo sumo C. Pero, la E no está dentro del plan de determinación o detección”, dice Ibañez, quien desea revertir esta situación con este kit. “Es muy importante que este sistema de diagnóstico esté disponible en los hospitales y, en especial, en bancos de sangre para evitar problemas porque, como mencioné, esta es una enfermedad emergente, lo cual significa que cada vez puede haber más casos. Y este riesgo de contaminar un banco de sangre es real”, advierte.
Mientras aguarda que MultiHEP-NanoDetect logre trascender los laboratorios y llegue al servicio de salud, Ibañez anticipa futuros estudios. “Este kit es para detectar los anticuerpos que quedan en el organismo luego de que un ser humano o un animal se infectó. Ahora, estamos tratando de desarrollar otro sistema que, en vez de reconocer los anticuerpos, identifique al virus. Esto sería para confirmar o descartar a personas que, en el momento del análisis, estén atravesando la enfermedad”, concluye.
Dos equipos
Quienes dieron vida a MultiHEP-NanoDetect son: Guadalupe Vizoso-Pinto, de la Universidad Nacional de Tucumán; Itatí Ibañez directora del Laboratorio de Ingeniería de Anticuerpos en INQUIMAE (UNA – CONICET); Paola Arce, bioquímica, becaria posdoctoral de CONICET estuvo a cargo de la selección de los anticuerpos y la puesta a punto del sistema de diagnóstico; Florencia Pavan, biotecnóloga y becaria doctoral del CONICET formó parte del desarrollo inicial del proyecto trabajando en la parte molecular. “Ella se ocupó de armar la biblioteca, que es esta copia enorme de todo el repertorio de anticuerpos de la llama”, detalla Ibañez. También participaron de este desarrollo Viviana Parreño y Marina Bok, integrantes de IncuINTA, expertas en inmunización y manejo de llamas. Detalles del trabajo en la siguiente publicación.