Un equipo internacional, con participación de científicas y científicos argentinos, detectó una proteína celular que ayuda a propagarse al virus del Zika, causante de malformaciones en recién nacidos. Pero no solo la identificó sino que la neutralizó y avanzó con un tratamiento que logró contrarrestar daños de la enfermedad. Por ahora, las pruebas son en un modelo animal pero podría servir para terapias en mujeres embarazadas.
Cecilia Draghi CDRAGHI@DE.FCEN.UBA.AR
Socióloga. Master en Periodismo UBA. Periodista especializada en ciencia en la Fundación Leloir.
Publicaciones
Utilizando imágenes obtenidas a partir de un microscopio electrónico, un equipo de científicas argentinas describió, por primera vez, estructuras del aparato bucal de este insecto que son usadas cuando pica nuestras cabezas. El próximo paso apuntará a desarrollar repelentes eficaces.
En estos días, las costas de Puerto Madero, San Isidro, San Fernando y Tigre muestran aguas de un color verde intenso a raíz de la multiplicación de un tipo de bacterias. Originado por causas naturales y de contaminación, este fenómeno supone riesgos para la salud de las personas, de los animales, y promete mantenerse toda la temporada.
En la cuenca argentina del océano Atlántico se encuentra, proveniente de la Antártida, el agua profunda más fría del planeta. Un relevamiento llevado a cabo por un consorcio internacional frente a la costa de Uruguay, en profundidades de más de 4.700 metros, detectó que su temperatura viene aumentando durante la última década.
Un sistema que abarata costos a la hora de detectar infectados por la pandemia fue puesto a punto por un grupo de científicas y científicos de Exactas UBA, y ya está en uso en la provincia de Buenos Aires. Ahora, el equipo, liderado por Roberto Etchenique, trabaja en la automatización del método para evitar contagios del personal al hacer los análisis.
El químico español José Luis Jiménez viene insistiendo en que la transmisión de COVID-19 está dominada por las pequeñas partículas que se expulsan al estornudar o hablar y flotan por un tiempo en aire, llamadas aerosoles. Jiménez, profesor de la Universidad de Colorado, critica a la OMS por minimizar la importancia que tiene esta vía de contagio y propone algunas alternativas para que las personas se protejan.