Anticiparse a la locura
Un estudio científico publicado hoy en la prestigiosa revista World Psychiatry describe un método que permite detectar con más de dos años de anticipación y con alta precisión si una persona padecerá un brote psicótico. La técnica podría también aplicarse a otros problemas mentales, como el Parkinson o las demencias. Ahora, intentan implementar el procedimiento en la Argentina.
Un psiquiatra recibe a un paciente nuevo en su consultorio. Durante la entrevista, el profesional le muestra al consultante una tablet en cuya pantalla se ve un dibujo. “Reláteme algo sobre esta imagen”, le pide. El paciente comienza a hablar y, automáticamente, el dispositivo graba y convierte en texto escrito su discurso. Minutos después, el médico ejecuta una aplicación instalada en la tablet, que le devuelve un número. La cifra le indica al especialista la probabilidad de que esa persona sufra un brote psicótico en los próximos años.
Esta escena, que todavía es una ficción, no estaría lejos de hacerse rutinaria en un futuro no muy lejano.
Porque, según un estudio que se publica hoy en la revista World Psychiatry –rankeada en el primer lugar entre las publicaciones de psiquiatría del mundo-, el análisis automático del lenguaje puede predecir un brote psicótico con una precisión muchísimo mayor que la que se consigue actualmente en el consultorio médico.
“Las entrevistas estandarizadas que se efectúan actualmente tienen una precisión del 30 al 35 % en la detección de pacientes que sufrirán un ataque psicótico. Es decir, que siete de cada diez personas diagnosticadas como ‘de riesgo’ en realidad no lo son. Nosotros, mediante el análisis automático del lenguaje, logramos reducir significativamente ese error. De hecho, pudimos predecir el brote psicótico con una precisión del 83%”, revela el doctor Diego Fernández Slezak, investigador del CONICET en el Laboratorio de Inteligencia Artificial Aplicada (LIAA) de la Facultad de Ciencias Exactas y Naturales de la UBA (Exactas-UBA), uno de los autores del estudio científico.
Números más precisos
En febrero de 2016, NEXciencia daba a conocer, y describía, el primer intento de predecir un evento psicótico mediante el análisis automático del discurso.
En aquel trabajo, publicado en la revista científica Schizophrenia, los investigadores de Exactas-UBA habían logrado un extraordinario 100% de precisión en sus predicciones.
No obstante, en aquella oportunidad, el propio Slezak minimizaba el logro porque -aclaraba- la muestra era “muy chica”. “Si bien eran 34 pacientes, que no es poco, solo cinco de ellos habían evidenciado dos años después una psicosis, y ese sí es un número muy chico”, explica hoy Slezak.
Para ampliar la muestra, el equipo del LIAA se contactó con la Universidad de California en Los Angeles (UCLA) y, a partir de ese encuentro, pudieron contar con 59 pacientes más, cuyo seguimiento durante más de dos años resultó en que 19 de ellos sufrieron algún brote psicótico. “El protocolo de entrevista que utilizan en la UCLA es ligeramente diferente, por lo cual tuvimos que modificar un poco el algoritmo que usamos en el primer estudio”, señala Slezak.
Según el artículo que se publica hoy en World Psychiatry, el análisis automático del discurso de los pacientes de la UCLA permitió predecir la ocurrencia del evento psicótico con más de dos años de anticipación y con un 83% de precisión.
“Nuestros resultados no solo demuestran que nuestro método es robusto sino que, además, valida nuestro trabajo anterior. Porque cuando analizamos nuevamente aquellos primeros 34 pacientes con el nuevo algoritmo que diseñamos para los pacientes de la UCLA obtuvimos un 72% de éxito en la predicción. Esto prueba que lo que encontramos no fue casualidad y que este método tiene usos clínicos en un futuro”.
Futuro en castellano
Además de continuar en la búsqueda de más pacientes para seguir ampliando la muestra, el desafío que se propusieron en el LIAA es tratar de efectuar estos estudios en la Argentina.
“Estamos en un diálogo muy fluido con varias instituciones dedicadas a la salud mental”, anuncia Slezak. Pero una de las principales dificultades para llevar a cabo este proyecto es el idioma: “Todo esto funciona en inglés. Las herramientas en castellano no están suficientemente validadas aun”, acota.
Entretanto, el investigador ya piensa en la necesidad de trasladar este “prototipo de laboratorio” a un “contexto hospitalario”: “Es un paso fundamental para que esto pueda llevarse a la clínica”, opina. Finalmente, Slezak resalta que se trata de un método “barato y poderoso para capturar información valiosa sobre el estado mental de un individuo”. De hecho, los investigadores del LIAA ya aplicaron exitosamente esta técnica informática para analizar otros estados mentales distintos a la psicosis. Por ejemplo, en el campo de las adicciones. En este sentido, Slezak concluye: “Nuestro trabajo no tiene por qué limitarse al campo de la psicosis. La posibilidad de acceder a información sobre el estado mental de un individuo podría también aplicarse al Parkinson, a las demencias, a la depresión, a la bipolaridad y a otros problemas mentales”.