Tecnología de punta en el mundo amateur
Un grupo de estudiantes y egresados de la UBA diseña un dispositivo para medir la performance de aficionados a distintos deportes. El proyecto se está gestando en la incubadora de Exactas.
En un futuro cercano, un jugador de fútbol o maratonista amateur tendrá la posibilidad de acceder a tecnologías que hasta ahora están más reservadas a profesionales. Durante sus ejercicios, podrá llevar un pequeño chip sujeto a la muñeca o al brazo y luego conectarlo a una computadora para medir su performance, compartir los datos en una red social y compararlos con los de otros deportistas o compañeros de un equipo.
Se trata de un dispositivo para medir la performance deportiva diseñado por estudiantes y egresados de la UBA. “La idea es acercar al deporte amateur una herramienta de análisis de entrenamiento, con la posibilidad de que pueda integrarse a una comunidad de deportistas online, además de servir como indicador de la evolución personal y grupal del deportista”, explicó Blas Rodríguez Irizar, uno de los responsables del proyecto, economista egresado de la UBA y estudiante de Ciencias de la Computación, de la Facultad de Ciencias Exactas y Naturales.
“Queremos estar presentes en sectores donde esta tecnología no desembarcó en toda su dimensión. En particular, la gente que practica deportes grupales como el fútbol, tenis, hockey o cualquiera que se juegue dentro de una cancha, no cuenta con este tipo de herramientas. Creemos que podemos construir un dispositivo útil para ellos, de alta calidad, que además sea accesible para el bolsillo de una mayoría considerable de deportistas”, dijo.
Para desarrollar la iniciativa, Blas conformó un equipo de trabajo interdisciplinario junto a otras cinco personas: “Trabajamos con un físico ruso, otro de los chicos estudia ingeniería en informática en la UBA, dos están terminando ingeniería electrónica en Bahía Blanca y hay dos economistas”.
La primera meta fue desarrollar el prototipo del chip y armar una red social orientada al fútbol amateur. El emprendimiento fue lanzado en 2012 y viene superando las expectativas de sus diseñadores. Ahora, el objetivo es seguir creciendo, y para ello presentaron el proyecto a Incubacen, la incubadora de empresas de base tecnológica de Exactas.
“Pienso que podemos llegar a recibir un gran aporte desde la Universidad, que nos puede llegar a abrir una gran cantidad de puertas, además de darnos mucho conocimiento en todos los aspectos de lo que significa ser emprendedor”, afirmó Blas, y agregó que también apunta a “conocer gente que comulgue con esa idiosincrasia”.
Emprender es la clave: “Quiero formar una empresa porque encuentro en ello una motivación que me hace pensar, buscar alternativas y probarme a diario. Vivo todos los días como un emprendedor, desde que me levanto hasta que me voy a dormir. En esto encontré la pasión y motivación de hacer algo que me llene y me brinde posibilidades de superación constantes, aun con altos niveles de presión e incertidumbre. Pero de esto se trata la cosa, ¿no es cierto?”.