Competencia internacional

Olímpicos en Química

Tres medallas de plata y una de bronce obtuvo la delegación argentina que compitió en la 44ta. Olimpíada Internacional de Química en Estados Unidos. Ahora, otro equipo entrenado en la Facultad participará de la Olimpíada Iberoamericana en Santa Fe, en septiembre.

3 Sep 2012 POR

El equipo argentino que participó de la 44ta. Olimpíada Internacional de Química: Mariano Calcabrini, Verónica Müller, Máximo Peré Schröder y Leandro Missoni . Los mentores de la delegación: Soledad Antonel y Juan Pablo Marcolongo, docentes del INQUIMAE (FCEyN-UBA) y miembros del equipo técnico-pedágogico de la Olimpíada Argentina de Química.

Regreso con gloria de la delegación argentina que participó de la 44ta. Olimpíada Internacional de Química en la Universidad de Maryland, Estados Unidos. “Fue uno de los mejores resultados en los últimos años. Los chicos volvieron con tres medallas de plata y una de bronce con un puntaje alto.  Se trató de un equipo muy sólido y parejo”, destacó la María Laura Uhrig, secretaria general del Programa Olimpíada Argentina de Química (OAQ) que depende de la Facultad.

La alegría del certamen entre representantes de 67 países que se disputó del 21 al 30 de julio, aún continúa en la Argentina. “Tuve la oportunidad de dar un examen complicadísimo, pero a la vez muy interesante, ya que éste toca temas de química muy moderna. Fui con la idea de representar lo mejor que podía a mi país y a la gente que me ayudó a llegar ahí. Sin duda alguna, es la mejor experiencia que haya vivido”, relata Leandro Missoni que obtuvo medalla de plata, al igual que Máximo Peré Schröder y Mariano Calcabrini, quien indica: “Lo que más rescato es la oportunidad de conocer y compartir con gente de distintos países y culturas. La OAQ, en general, fue muy importante para decidirme sobre qué y dónde iba a estudiar”. Por su parte, Verónica Müller, obtuvo la presea de bronce.

Desde hace meses, todos han venido realizando un esfuerzo significativo para participar de esta competencia, donde deben sortear dos exámenes de cinco horas de duración cada uno, en días diferentes. Uno es una evaluación práctica y otro, un examen teórico de 40 páginas. “La prueba es muy difícil. No sólo por el nivel de conocimiento exigido sino por el estrés al que están sometidos”, evalúa Uhrig, quien también es profesora e investigadora del Departamento de Química Orgánica. Ellos, para llegar a esa instancia, primero debieron sortear con éxito las Olimpíadas Nacionales que se disputaron el año pasado, y ganarse los cuatro puestos finalistas entre 24 candidatos posibles.

Una vez elegidos fueron entrenados y capacitados en la Facultad, lo que no sólo llevó horas de preparación sino también postergar sus estudios personales. “Según el reglamento de la Olimpíada Internacional, los chicos deben ser menores de 20 años y no universitarios. Entonces participan alumnos de escuelas secundarias, pero como nos regimos por el calendario del Hemisferio Norte, estos chicos han decidido postergar su ingreso a la universidad un año y representar a sus escuelas de origen”, explica Uhrig, desde su laboratorio en el departamento de Química Orgánica.

La delegación de estudiantes fue acompañada por dos jóvenes mentores, Paula Antonel y Juan Pablo Marcolongo, ambos miembros del equipo de la OAQ e integrantes del Departamento de Química Inorgánica de la Facultad. Ellos, entre sus tareas, debieron traducir el examen que está en inglés, idioma oficial del certamen, al español para que los chicos pudieran responderlo. “Los mentores trabajan en la OAQ desde hace cuatro años y era su primera experiencia internacional. Nos pareció que era una excelente oportunidad para ellos”, comenta Uhrig quien no oculta su satisfacción por el trabajo realizado del equipo, y ya se prepara para un nuevo desafío: la 17ma. Olimpíada Iberoamericana de Química.

Ahora, al Iberoamericano

Sin descanso en su tarea, Uhrig, anticipa: “Ahora estamos organizando junto con la Facultad de Ingeniería Química de la Universidad Nacional del Litoral, la 17ma. Olimpíada Iberoamericana de Química, que se hace del 22 al 30 de septiembre en la ciudad de Santa Fe. Es una co-organización y está auspiciada y financiada por el Ministerio de Educación de la Nación como todas nuestras actividades”.

Desde hace dos años que los organizadores están llevando adelante los preparativos para este encuentro donde participarán 17 países. Una de las novedades es que Panamá, por primera vez, se presenta como observador científico. Al igual que la internacional, la competencia reúne a delegaciones de cuatro estudiantes por nación, quienes tendrán un examen teórico y práctico.  Aquí, la lengua oficial será el español, habiendo una instancia de traducción para los países de lengua portuguesa.

Los cuatro participantes argentinos asistieron a dos semanas de intenso entrenamiento en la Facultad, y tres de ellos, que son del interior, se alojaron en el sector Deportes de la Ciudad Universitaria. ¿Sus nombres? Lautaro Vogt, de EET 455 de Esperanza, Santa Fe, al igual que Cristian Bonvin. Paula Borovik, EET, Otto Krause, Capital Federal, y Baltasar Amaya, Colegio Nacional Illia, de Mar del Plata.

“Es una experiencia muy linda”, dice Paula mientras está con tubos de ensayo en el laboratorio de Exactas, al igual que Baltasar: “Estamos muy emocionados, estudiando mucho y disfrutando”.  Por último, Uhrig destaca: “No sólo es una responsabilidad sino un honor organizar la Iberoamericana”.

 

Los participantes

Los países que participarán de las próximas Olimpíadas Iberoamericana de Química son: Brasil, Bolivia, Cuba, Costa Rica, México, Chile, Colombia, España, Portugal, Uruguay, Venezuela, Perú, Paraguay (por primera vez con estudiantes, fue observador el año pasado), Guatemala.