Los estudios sobre el uso de drogas psicodélicas para tratar depresión grave avanzan en el mundo con resultados prometedores. Un equipo argentino en colaboración con el Imperial College de Londres logró predecir qué pacientes mejoran con ese tratamiento, en base a imágenes del cerebro. Las trabas legales dificultan la investigación con estas sustancias pero en pocas décadas podrían converger en una terapia habitual. El equipo, además, busca realizar estudios con pacientes oncológicos.
hongos
En plena selva de Misiones un equipo de investigación halló una especie de hongo que nunca antes había sido encontrada en la Argentina, y guardaba secretos ahora develados: posee compuestos que combaten a otros hongos causantes de afecciones en distintos cultivos comerciales.
Un equipo de científicas y científicos analizó un hongo que se aloja en el interior de las manzanas y las daña. Se trata de una afección que tiene una alta incidencia en los cultivos de Argentina. El riesgo mayor es que ese hongo, por las toxinas que produce, también podría afectar a las personas que las consumen.
La ingesta de hongos puede causar graves problemas de salud e incluso la muerte de una persona. Cada otoño, dadas las condiciones ambientales que facilitan su crecimiento, se produce un pico de consultas al Servicio de Identificación de Hongos Tóxicos de Exactas UBA. El año pasado, el inicio de la cuarentena se sumó a la clave estacional y provocó un récord de casos, el doble de los que se registran habitualmente. Los investigadores aconsejan no consumir hongos sin asesoramiento previo.
Un estudio científico analizó cada una de las etapas de fabricación del tofu a partir del grano de soja. Buscaban aflatoxinas, que son sustancias cancerígenas producidas por ciertos hongos. Los resultados muestran que, si la soja está contaminada, dichas toxinas atraviesan todo el proceso sin destruirse y quedan en el producto final.
Estudios preliminares llevados a cabo por un grupo de científicas obtuvieron resultados prometedores utilizando “trametes”, un hongo autóctono, que recolectaron de la selva misionera, para degradar colillas de cigarrillos. Las investigadoras observaron una reducción significativa en la toxicidad de estos residuos del tabaquismo que reúnen casi dos mil sustancias contaminantes diferentes.