El dia que amanecimos en Londres

En el día de ayer, martes 11 de junio, la ciudad de Buenos Aires y sus alrededores amanecieron inmersos en densos bancos de niebla, que transformaron la postal típica porteña en otra más parecida a la habitual imagen de la capital inglesa.

Sin embargo, este fenómeno no se circunscribió solamente a la ciudad de Buenos Aires y sus alrededores, sino que también afectó a gran parte de la provincia de Buenos Aires, el este de Córdoba y el sur de Santa Fe y de Entre Ríos, lo cual se puede apreciar claramente en la imagen satelital.

Como consecuencia de los bancos de niebla, la visibilidad se redujo notablemente -por momentos a valores menores a los 100 metros- provocando complicaciones en el tránsito y la cancelación de vuelos en los aeropuertos de Aeroparque y Ezeiza.

Este fenómeno es típico de la Pampa Húmeda, especialmente en esta época del año, que es cuando se da una mayor cantidad de estos eventos. En este caso particular, la niebla se produjo principalmente por la combinación de varios factores. Por un lado, aire húmedo, es decir con un alto contenido de vapor de agua, proveniente de la provincia de Santa Fe y del este de Córdoba se desplazó hacia la provincia de Buenos Aires en la noche previa. Al mismo tiempo el enfriamiento ocurrido luego de la puesta del sol del día lunes posibilitó que la humedad relativa del aire se acercara al 100%. Esto significa que el aire al enfriarse y humedecerse, se saturó de humedad, y en consecuencia parte de esta humedad comenzó a condensarse, y así formó una nube a ras del suelo, o lo que es lo mismo, dio lugar a la niebla. Por su parte, el escaso viento reinante contribuyó a que la niebla se afianzara e hiciera más espesa. Estos procesos actuaron durante varias horas a lo largo de la noche, de forma tal que hacia el amanecer, la niebla se tornó muy densa y la misma se extendió en la vertical por varios cientos de metros.

Una vez que amaneció, los débiles rayos solares comenzaron lentamente a calentar la superficie, lo que ayudó a elevar de a poco las temperaturas y consecuentemente a disminuir la humedad. Como resultado, la niebla comenzó a disiparse, primero cerca de la superficie y luego en sus capas más altas, hasta que por la tarde el cielo de la ciudad de Buenos Aires se limpió casi por completo de nubosidad. Sin embargo, en amplias zonas de la provincia de Buenos Aires, la niebla persistió a lo largo de toda la jornada, haciendo de esta una jornada gris, fresca y húmeda en dichas zonas.

Imagen satelital correspondiente al canal visible del martes 11 de junio a las 10:40. El manchón blanco que cubre desde el centro de la provincia de Buenos Aires hacia el norte indica la presencia de niebla. Fuente: Servicio Meteorológico Nacional