
En el invierno, el mosquito Aedes aegypti no se ve y parece que no está, pero en verdad sus crías están diseminadas por doquier esperando salir al mundo cuando suban las temperaturas. La estación fría constituye el mejor momento para llevar a cabo una limpieza profunda de objetos que elimine los huevos de esta especie que transmite distintas enfermedades como dengue, chikungunya, y zika.