Por primera vez comprueban que en el fondo del mar hay corrientes intensas, un hecho inesperado y no previsto por los modelos vigentes en el Atlántico Sudoeste. Este hallazgo es uno de los tantos que surgen de las exploraciones de un equipo científico de Argentina y Francia.
Oceanografía
Científicos argentinos detectaron las primeras evidencias de corrientes ascendentes, frías, que vienen de zonas subpolares y llevan nutrientes a la vida subacuática de la plataforma continental argentina. La corriente de Malvinas juega un rol clave en este mecanismo de fertilización marina.
Es una iniciativa coordinada desde el Ministerio de Ciencia y Tecnología de la Nación, en la que participan varios ministerios, institutos de investigación y universidades. Se trata de una política de Estado orientada a concentrar esfuerzos en la investigación y apoyar con información la soberanía argentina en el Atlántico Sur.
A bordo del velero La Sanmartiniana, expertos de Exactas UBA y de la CONAE auscultaron el Río de la Plata, uno de los estuarios más turbios del planeta. A lo largo de trece horas, se tomaron muestras de agua y se realizaron medidas radiométricas para poder elaborar un mapa de sedimentos. NEX formó parte del viaje para contar todo lo que sucedió.
Un equipo de científicos, entre ellos investigadores de Exactas UBA, zarpó a bordo del velero “La Sanmartiniana” y navegó trece horas para tomar muestras de agua y realizar medidas radiométricas, que permitan elaborar un mapa de sedimentos a partir de imágenes satelitales del Río de la Plata, uno de los estuarios más turbios del planeta.
Desde el Servicio de Hidrografía Naval un grupo de investigadores y docentes del Departamento de Ciencias de la Atmósfera y los Océanos de Exactas UBA, encabezados por Alberto Piola, se dedica a estudiar las corrientes oceánicas y el impacto que podrían producir en el ecosistema marino y en el clima.