Pueden ser la peor pesadilla para usuarios y organizaciones. Detrás de programas aparentemente anodinos, se esconden virus capaces de infectar la computadora, robar información mediante suplantación de identidad (phishing) o crear una red autómata (botnet) con fines delictivos. Con el uso de las redes sociales y los teléfonos móviles, sus técnicas de propagación resultan cada vez más sofisticadas e involucran un enorme desafío para los especialistas en seguridad.
teléfonos celulares
La explosión de las tecnologías inalámbricas y de la telefonía celular, así como la presencia creciente de ciertos electrodomésticos en el hogar, incrementa paulatinamente nuestra exposición a las radiaciones no ionizantes. Se sabe que éstas aumentan la temperatura del cuerpo, pero la insuficiencia de estudios genera incertidumbres que obligan a una gestión personal del riesgo.
Un equipo multidisciplinario de investigadores argentinos determinó cuantitativamente de qué manera las distracciones que provoca el teléfono celular afectan el diálogo cara a cara entre dos individuos. Los resultados muestran que la desatención ocasionada por el dispositivo no solo altera la percepción del relato sino, también, la apreciación acerca de la otra persona.