
Por primera vez, un estudio científico consiguió medir rigurosamente la relación que existe entre la posición socio-económica de un hogar y la enfermedad de Chagas. Enfocado en el concepto de vulnerabilidad social, el trabajo muestra las desigualdades en el riesgo de transmisión y aporta una herramienta relevante para asignar eficientemente los recursos.