Hoy falleció el astrofísico más conocido de nuestro tiempo a los 76 años de edad, tras una enfermedad que se había convertido en su carta de presentación. Los físicos Juan Pablo Paz y Fernando Lombardo recorren en esta nota los aportes de Stephen Hawking y reflexionan sobre su popularidad.
Fernando Lombardo
A las 11.53 del 14 de septiembre de 2015 la pantalla del físico de guardia Marco Drago, en el Instituto Max Planck (Hannover, Alemania), le indicaba la entrada de un correo automático desde los sensores del complejo experimental LIGO (Estados Unidos). ¿Su contenido?, los datos de una colosal evidencia empírica esperada por casi veinticinco años y predicha por Einstein casi un siglo antes. El regalo perfecto para el cumpleaños número cien de la Teoría General de la Relatividad.
Científicos a cargo del proyecto LIGO anunciaron la detección de manera directa, por primera vez en la historia, de las ondas gravitacionales que habían sido postuladas por Einstein hace un siglo. La confirmación de la existencia de estas ondas abre una nueva etapa en la astronomía ya que su estudio brindaría información clave para desentrañar algunos de los principales misterios de la astrofísica actual, entre ellos, el origen del universo.
Hace pocas horas, investigadores del proyecto de colaboración internacional BICEP2, anunciaron en conferencia de prensa la obtención de pruebas directas de la Teoría de la Inflación, que postula que la expansión del Universo se dio de manera instantánea tras el Big Bang.
Pensar en el vacío como ausencia de todo ya es una empresa complicada. Pero pensar que, aun donde no hay nada, existen fuerzas capaces de atraer placas metálicas entre sí parece aún más extraño. Sin embargo no lo es en el universo de la mecánica cuántica. El físico Fernando Lombardo y su equipo de investigadores se dedican a estudiar este fenómeno conocido como Efecto Casimir.